LA SALIVA DEL TIGRE/22
22 octubre, 2010
SUBLIMACIÓN
Sucedió una tarde de hojas arrastradas. Misael, el gaitero de mi pueblo, subió a la loma desde la que celebraba la vida. Y se puso a tocar como nunca. Todos en el bar nos miramos, sobre los dominós, mudos de repente. Pero sólo yo subí. Aún alcancé a ver la gaita, sobre la piedra, vaciándose tristemente por los roncones.
PABLO GONZ
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22 octubre, 2010 a las 12:16
Corriendo, corriendo, que me voy a la presentación de un concurso de microrrelatos que se organiza aquí en Valdivia. ¡Me han nombrado jurado!
Abrazos a todos,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 12:25
Qué bonito Pablo, el sonido de las gaitas ya es en sí mismo muy emotivo y la palabra «roncón» me ha gustado mucho, no conocía tanto la gaita.
Ya nos contarás del concurso
Un abrazo de viernes!
22 octubre, 2010 a las 13:16
Me alegro de que te haya gustado, Ana. Te cuento pormenores por mail, que todavía tengo pendiente responder a tus «manías».
Abrazo urgido,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 12:41
Celebración de la vida! Vivencia exclusiva. La gaita se vació, y la música se elevó para el universo, sólo para quienes estuvieren preparados a sentir. Abrazo
22 octubre, 2010 a las 13:17
Sublimación del arte.
Un fuerte abrazo, Silvia, y gracias por venir.
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 12:51
Oh, qué maravillosa imagen! Disolverse en aire, en música de gaita, las vejigas vaciándose para celebrar la vida…
Bello, Pablo.
22 octubre, 2010 a las 13:19
Gracias, Mónica. Este micro tiene su origen, como tantos otros, en una experiencia personal. Acá en Valdivia conocí una vez a un gaitero que me contó lo que experimentaba cuando tocaba la gaita. Decía que se sentía desaparecer. Esta imagen representa aquel sentimiento, tras la ronda de algunos años por mi interior.
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 13:56
Este me ha gustado mucho. Como a Silvia me ha llamado la atención lo de celebrar su vida.
Un abrazo.
22 octubre, 2010 a las 14:05
Me alegra, Torcuato. Lo de celebrar la vida quizás lo hacemos demasiado poco, ¿no?
Por otro lado, gracias por la información que me mandaste al correo.
Abrazos,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 14:21
Redondo Pablo. Ferpecto. Podría contarte,frase por frase, las imágenes mentales, olfativas, táctiles… que va generando tu relato. Pero no.
Me limito a dejarte aquí mi sombrero.
Un admirado abrazo.
22 octubre, 2010 a las 14:26
Que agradezco con una profunda inclinación de cabeza, Kum. Guardo tu sombrero entre mis fetiches para acariciarlo cuando la vida me pegue de patadas.
Abrazos sentidos,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 15:02
Encancio una sidra y me la tomo a tu salud, Pablo. Buen finde.
22 octubre, 2010 a las 15:51
Gesto que te agradezco en el alma, Víctor. Que lo pases en grande.
Abrazos,
PABLO GONZ
PD.: Los libros siguen en Madrid (problemas en la aduana, a ver si los «liberan» los burócratas). Te aviso cuando vuelva a correr «La saliva del tigre» por las venas del planeta.
22 octubre, 2010 a las 15:08
Como dice una canción de tu pueblo (que por cierto suena muy bien con la gaita): «Apenas sale la aurora/ allá en las montañas se oye un cantar/ canciones que a son de gaita leré/ suenan en labios leré/ de algún gañán.» Es la de En casa del tío Vicente, por si te suena.
Te ha quedado un micro que me suena como la carretera que sale de Boñar toda derechina pa´arriba, pa´arriba… Como si, en días melancólicos como el de hoy, subiendo, subiendo, fueras a llegar a acaraciar la panza gris de las nubes. Allí, entre la niebla, donde suenan los roncones de las gaitas… Ya sabes.
Hala, un abrazo fuerte y arrea, a ver si vas a llegar tarde, que me emociono.
22 octubre, 2010 a las 15:54
Y sí que emocionan tus palabras, Alberto. Ojalá que sirvan para atraer a algunas almas sensibles hacia aquellas hermosas tierras. ¿Cómo llegar? De León hacia el norte a Boñar (unos 50 kilómetros, ¿no?) Más al norte otros ¿20? hasta Cofiñal, en las fronteras mismas con Asturias.
Abrazos, rapaz, y que lo pases bien. Gracias por venir y por dejar tu señal.
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 16:24
Justo. Y que no confundan los tópicos. Las fronteras son obras de los hombres, hay que ararlas en el suelo con gran esfuerzo. Y si encima pasa, como entre Asturias y León, que tenemos que arar entre montañas, despídete de la empresa. Te podía poner alguna grabación hecha al sur de León, tocada con gaita y que cualquier persona de fuera de aquí colocaría en Asturias, que daría para reflexionar mucho sobre los tópicos y las fronteras.
Abrazos.
22 octubre, 2010 a las 18:38
Para las culturas agrícolas, los montes son fronteras porque la actividad principal se desarrolla en llano. Para las culturas ganaderas y cazadoras, los montes son patria común, sin atender a las vertientes de los ríos. En el caso que citas, desde antiguo los cántabros y los astures ocupaban ambas vertientes de la cordillera con sus correspondientes extensiones en los llanos.
Abrazos paleogeográficos,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 15:27
Me gustó la historia, la música de la gaita… pero me quedé sobre todo con una frase: solo subí yo. El resto sigue con la partida. Saludillos gaiteros
22 octubre, 2010 a las 15:55
Hay algo en esa frase que te habla de ti, Puck.
Abrazos fuertes y que tengas un estupendo fin de semana.
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 16:06
¿Y a mí que me estaba pareciendo que el gaitero celebraba la vida para adentrarse en la muerte?
Un abrazo de fin de semana, poco inspirado con las interpretaciones, por lo que veo.
22 octubre, 2010 a las 17:02
Adhiero! Yo pensé exactamente lo mismo. Y me había encantado esa interpretación. :S
22 octubre, 2010 a las 18:43
Y nada impide, Malena, que sigas alimentando tu interpretación. Si la literatura genuina se define por algo, es por su respeto a la libertad lectora.
Abrazos librepensadores,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 18:41
Maite, siempre procuro que mis textos contengan una parte definida y una indefinida para que el lector la complete a su gusto, según los dictados de su imaginación. Todas las interpretaciones son correctas.
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 16:20
Pablo cuando se cuenta y se escribe una historia así sólo se puede hacer una cosa. Espero que te lleguen los ecos de mis aplausos y los vientos de mi emoción.
Excelente, no conozco otra palabra por arriba.
Un abrazo de admiración.
22 octubre, 2010 a las 17:54
Me llegan, Agustín, me llegan. Y te los agradezco de todo corazón. Un orgullo tu comentario que guardo en mi pequeña colección de fetiches.
Abrazos vertiginosos,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 16:25
Pocos, solo unos cuantos, sino es que uno solo son los que se sacuden de los artilugios de la vida.
Valiente.
Un abrazo Pablo, suerte en el concurso, no seas un juez implacable.
22 octubre, 2010 a las 17:57
Fíjate en Misael, por ejemplo, que deja atrás su gaita para pasar ¿adónde? Un gesto que no se practica sin valentía (a no ser que sea involuntario).
Abrazos vagabundos, Daniel, y gracias por tu ánimo. A ver qué pasa en el concurso pero lo importante (para mí) ya pasó: el micro está en el mundo.
22 octubre, 2010 a las 16:25
¡Vaya forma de tocar la gaíta!! Tan fuerte sopló que su vida se quedó dentro de la gaita, ¿no? Se convirtió en música para celebrar la vida y los que estaban escuchando gozaran de verdad. Se da todo por un gozo así.
Bonito relato Pablo.
¿Que tal la carrera hasta el consurso? Espero que llegaras a tiempo y puedas contarnos los pormenores.
Besicos muchos.
22 octubre, 2010 a las 17:59
Ha sido un acto muy sencillo y emblemático. Diez a doce personas, en mitad de la ciudad, sin sillas ni mesas de por medio. Hemos leído la proclamación, la hemos convertido en un avión y la hemos tirado al río. A partir de ahora haremos la convocatoria oficial y ¡a juzgar!
Besicos muchos también para ti, Nani, y gracias por venir.
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 16:42
¡Bravo! ¡Vaya detallazo! ¡Y todo un dechado de sensibilidad!
Un abrazo.
22 octubre, 2010 a las 18:01
Pensé que te gustaría, Rubo.
¡Asturias, patria queridaaaa!
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
22 octubre, 2010 a las 16:55
Me ha gustado mucho(sinceramente lo digo) este micro por distinto, por emocionar y porque me parece estupenda esa imagen final de la gaíta sola y desinflada.
Saludos!!
22 octubre, 2010 a las 18:02
Y a mí me encanta escuchar tu opinión, Rosana, porque sí y porque sé que sabes mucho de esto.
Todo un honor: genuflexión y beso en la mano.
PABLO GONZ
23 octubre, 2010 a las 9:14
A veces la música es capaz de grandes hazañas…
23 octubre, 2010 a las 18:09
¡Y que lo digas tú, Aída!
Abrazos operísticos,
PABLO GONZ
23 octubre, 2010 a las 17:13
Estupendo, Pablo. Una imagen muy potente
23 octubre, 2010 a las 18:10
Gracias, Woody, por venir, por leer y por dejar tu huella.
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
24 octubre, 2010 a las 0:05
Solo el entendió que Misrael tocaba como nunca, porque era su última sinfonía. Era como si tocara para é, que supuera que habia decido poner, en la loma de la vida, fin a la misma.
24 octubre, 2010 a las 22:29
Interesante tu interpretación, Fernando. Gracias por compartirla.
Un fuerte abrazo,
PABLO GONZ
24 octubre, 2010 a las 2:09
No sabemos donde se fue, pero no podemos decir que se fuera sin hacer ruido 🙂
«Quedote un micro muy guapo»
24 octubre, 2010 a las 22:36
Gracias, Cybrghost, por tu buen humor y por tu demostración políglota. 🙂
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
24 octubre, 2010 a las 10:05
Qué gran suerte la mía que me hayas encontrado.
Un inmenso placer leerte y descubrir nuevos micromundos.
Un abrazo. Quedas anclado en mi hemisferio derecho. 😉
24 octubre, 2010 a las 22:38
Te agradezco el cumplido, Egolastra. Yo también siento como una suerte haber llegado a tu blog que destila inteligencia. Y poder servirte de contacto con mucho buen microblogger que visita este espacio. Abrazos fuertes y gracias por venir.
PABLO GONZ
24 octubre, 2010 a las 14:37
Casi puedo verlo, Bellamente triste.
24 octubre, 2010 a las 22:39
El próximo lo escribiré con mayor intensidad, Neli, y lo verás.
Abrazos bellos para ti,
PABLO GONZ
25 octubre, 2010 a las 1:09
Hola! muchas gracias x dejarme un comentario en mi blog y por darme la posibilidad de conocer tu trabajo 🙂
me gustó mucho todo lo que pude leer hasta acá,
saludos y gracias otra vez!
25 octubre, 2010 a las 11:56
Muchas gracias por tu comentario, Zamanis. Eres bienvenida por acá siempre que quieras.
Un cordial saludo,
PABLO GONZ