Seleccionados en VIEJOS AMIGOS
30 julio, 2013
Estimad@s:
Más abajo aparece la lista de los microcuentos que formarán la audioantología solidaria VIEJOS AMIGOS. El procedimiento de selección se basó en dos criterios: mi gusto literario y la duración máxima del disco. Por lo mismo, estoy seguro de que han quedado fuera de la antología trabajos de gran valor y se incluyen otros que a algunos les parecerán malos. Es el riesgo que decidí asumir como editor.
Los títulos de los textos aparecen por orden de llegada pero no serán publicados así. Os ruego que reviséis los títulos y los nombres y que me hagáis saber los errores o faltas que veáis.
La siguiente fase del proyecto es la convocatoria de un cásting de voces. Estoy trabajando en este asunto y pronto publicaré una comunicación al respecto.
Muchas gracias a todos por participar.
Un fuerte abrazo de,
Pablo Gonz
21 DE ABRIL de Pablo Gonz
ASÍ ES IMPOSIBLE DORMIR por Pablo Garcinuño
JUEGO ABSURDO por Pablo Garcinuño
VENTANA OVAL por Paz Monserrat Revillo
LA SINAPSIS DE TUCO por Cristian Cano
INTERÉS por Cristian Cano
ESA CALLE por Patricia Nasello
TIEMPO por Esteban Dublín
EL CORAZÓN NO ENTIENDE DE MOJONES por Javier Ximens
SOLEDAD por Daniel González Cuesta
EN EL ENTIERRO DEL MAGO por Daniel González Cuesta
VIEJO GENERAL por Raúl Garcés
LA DESPEDIDA DE PAPÁ por Patricia Jiménez (Mariposa)
PERSISTENCIA por Ángel Olgoso
SUBIR ABAJO por Ángel Olgoso
MANOS QUE VEN por Ángel Olgoso
RECONCILIACIÓN por Ángel Olgoso
ALZHEIMER por Alberto Benza
PACTO por Alberto Benza
EL TIEMPO NO PERDONA por Antonio Martín Jiménez
ES EL MAR por Santiago Eximeno
EL SOL por Susana Revuelta
VUELO DE PÁJAROS por Maite García de Vicuña
SOMOS NOVIOS por Miguel Ángel Molina
EN COMPAÑÍA por Miguel Ángel Molina
LA ABUELA por Xavier Blanco
EN EL GERIÁTRICO (CARTA A LOS REYES MAGOS) por Xavier Blanco
EL TIEMPO SIGUE SIENDO UN FLUIDO CIRCULAR por Iván Teruel
MILAGRO por Laura Nicastro
LAS ABUELAS CIEGAS por Ana Blanco
LAS ABUELAS CIEGAS por Mar González Mena
TU REFLEJO EN EL AGUA por Mar González Mena
EL ESTORBO por Petra Acero
TRES VELAS por Petra Acero
TO–TÓ por Ester Nievas Molina (MA)
TRIS, TRAS por Esperanza Temprano
PASA LA VIDA por Susana Pérez
ENGAÑO por Nicolás Jarque
UNA PAREJA MUY JOVEN por Nicolás Jarque
ENCAJAR UNA VIDA por Gema Bocardo
TRASTOS VIEJOS por Ernesto Ortega Garrido
INERCIA por Mónica Brasca
INFANCIA por David Vivancos
EL JARDINERO por José Manuel Ortiz Soto
LA ÚLTIMA MUSA por José Manuel Ortiz Soto
SU NOMBRE por Elena Casero
AMOR por Juan Santiago
BROTAN JAZMINES por Luis Héctor Gerbaldo
DOLOROSA REALIDAD por Claudia Cosenzo
HEROÍNA por María Blanca Zelis
DIGNIDAD Y JUSTICIA por David Moreno
FOTOGRAMAS por David Moreno
RESISTENCIA por Rubén Rojas Yedra
ISLA INFANCIA por Rubén Rojas Yedra
PIDE UN DESEO por Rubén Rojas Yedra
EL PRODUCTO MÁS VENDIDO DE LA SECCIÓN por Rubén Rojas Yedra
ETAPAS por Francisco Manuel Marcos Roldán
EL BAILE por Yolanda Nava
NOCTURNIDAD por Alberto Martín (Niñocactus)
HAMBRE DE GATOS por Purificación Menaya
EL MEJOR PAISAJE DEL MUNDO por Juan Manuel Montes
LOS LIBROS EN DONDE NOS MIRAMOS por Juan Manuel Montes
EL LLAMADO por Juan Manuel Montes
EL LABERINTO DE LOS DÍAS por Juan Manuel Montes
DOS A UNO EN BLANCO Y NEGRO por Elisa de Armas
DESAFORTUNADA EN AMORES por Elisa de Armas
CAMINO DE VUELTA por Ana Vidal
¿QUIÉN ERES? por Ana Vidal
NOVELA 35 SEGÚN MIGUEL BAQUERO
25 julio, 2013
Estimad@s: Hoy, el escritor y crítico español Miguel Baquero, conductor del blog El mundo es oblongo, comparte con nosotros esta personal crítica de la Novela 35 lebensráumica. Muchas gracias, Miguel.
En primer lugar, te confieso que al principio me costó adaptarme al formato; yo soy un hombre de letras y en verdad cuesta adaptarse a “oír” una novela; a mí al menos me ha requerido mucha atención (en plan de estar tumbado, cerrar los ojos, no entretenerme, por ejemplo, bebiendo una cerveza y comiendo aceitunas, y casi sin fumar). Imagino que es la falta de costumbre: al tercer o cuarto audiolibro podré incluso irlo oyendo mientras monto en bici, pero así ha sido.
Adaptarme, como te cuento, me ha llevado sus cinco o diez minutos, pero luego ya resulta bastante agradable la escucha y me he metido de lleno en la fabulosa historia de la habitación que aparece, desaparece y todos se roban unos a otros. Pero antes, de nuevo, un par de detalles de la locución: aunque en general es agradable, sobre todo para estar narrado por una sola persona (te felicito si eres el locutor —que creo que sí—, porque entiendo que no es nada fácil), he advertido que, a veces, se producen como saltos, como “golpes” en el ritmo, y al final he llegado a la conclusión que es cuando en el texto van dos vocales, que por huir quizás del encadenamiento entre una y otra que podría sonar vulgar, haces (hablo de ti como locutor) un “puente” un poco largo entre a y e, entre o y a… entre vocales, en suma. Pero insisto en que es un detalle que no impide, ni mucho menos, la escucha. En general, me ha parecido un gran trabajo, pues el tono de voz ni aburre ni cansa ni es monótono y tiene gran seguridad.
Sobre la “redacción” en sí, te diré que he captado con agrado frases muy literarias. No es lo mismo que en un libro, en que las puedes subrayar y quizás tendría que haber ido anotándolas, pero así de primeras “silencio gordo del patio”, “zapatos que ya le llevan fuera del ascensor”, las manos del portero tamborileando… En general, y como abundan las imágenes muy “gráficas”, la historia se sigue perfectamente y uno se la pinta muy bien en la imaginación. No sé si primero fue el texto y luego la idea de locutarlo, o al revés, pero está claro que concuerdan perfectamente el contenido (ágil, sin digresiones, directo, y lleno de imágenes muy gráficas) con el continente.
Pese a todo (y mi felicitación sincera) yo, que soy no sé si clásico o chapado a la antigua, quisiera verlo publicado en papel, porque es una historia muy divertida, con un argumento con algo de parábola, entre literatura simbolista y del absurdo, en que se han producido grandes obras. Hay quizás un tono un poco anticuado en el escenario del relato —la casa de vecindad suena a años cincuenta— que no sé si apuntártelo en el debe o en el haber, porque al fin y gracias a ese tono guardas cierta conexión con la literatura de esa época de medio siglo que dio tantas grandes obras en ese plan parabólico-absurdo. Corrías el riesgo, por decirlo de algún modo, de caer en lo apolillado pero la energía de la historia creo (no, afirmo) que te ha librado de ese peligro.
En suma, una muy buena historia, un experimento muy interesante, una locución quizás a afinar en ese espacio entre vocales, pero en general muy bien, y nada, que te deseo toda la suerte del mundo porque, desde luego, estás ofreciendo un “material” bastante, bastante digno, ya lo creo.
MADRID/LA SANGRE–12
19 julio, 2013
Alejandro Carrizo, de cuatro años de edad, está muerto de envidia porque ve a los otros niños jugando en la piscina y él no puede porque no sabe nadar. Con cara de azufre, se acerca al bordillo donde están su padre y su hermano Samuel, de diez años, y dice: «Quiero bañarme». Pero ninguno de los dos le hace caso. «¡Quiero bañarme!», grita. Sólo Samuel le mira y es para negar con la cabeza. A Alejandro no le gusta el gesto. Se acerca al bordillo y mira el agua, celeste y undosa. Los gritos de los niños desaparecen. La mano de su padre rasca la tripa de su padre. Alejandro vuelve a mirar el agua. Salta. El ruido alerta a Samuel: «¿Le saco?», pregunta el niño. «Espera», responde el padre. Alejandro lleva un bañador amarillo. Se ve que conserva el aire en los pulmones. Mueve las piernas y los brazos. Pocos segundos después, emerge e inspira con fuerza. Cierra la boca y se sumerge de nuevo. Patalea. Rema con las manos. Ha aprendido a nadar.
NOVELA 35 SEGÚN PURI MENAYA
17 julio, 2013
Estimad@s amig@s:
Otra gran amiga de este blog, Puri Menaya, de El rincón de la bruja de chocolate, comparte con nosotros aquí su comentario sobre Novela 35 lebensráumica.
Muchas gracias, Puri, y a todos los demás lectores (auditores).
Abrazos grandes,
PG
«Yo ya la he escuchado y me ha sabido a poco. Vamos, que hubiera seguido escuchando más. Os animo a que también la escuchéis y la compartáis. No voy a contaros mucho de ella, tenéis que escucharla. Nos presenta una comunidad de vecinos, con sus distintos personajes y sus circunstancias, y plantea el problema de ese pequeño espacio vital en el que se encuentran inmersos, que los ahoga. La solución para ampliar ese espacio, traspasa las barreras de lo cotidiano. Y cuando todo parece estar en su sitio, la familia feliz, ese espacio recién conquistado vuelve a desaparecer. Con su pelín de humor, con una buena caracterización de los personajes (ese toque de los vecinos filipinos por aquí y por allá), al final nos lleva de nuevo al principio.
No sé si es una novela corta o un cuento largo pero se sigue con placer.
Es además un buen regalo para las personas mayores, para aquellos que van perdiendo la visión o para ciegos. Yo espero llevársela a mi madre, que ya no lee, precisamente porque sus ojillos cada vez se cierran más.»
NOVELA 35 SEGÚN PATRICIA NASELLO
12 julio, 2013
Querid@s amig@s:
Patricia Nasello, docta escritora argentina cuyos fabulosos microrrelatos podéis disfrutar pinchando aquí, me ha mandado el siguiente comentario referente a Novela 35 lebensráumica. Yo, desde luego, pienso pasar un estupendo fin de semana. Y espero que vosotros también. Patricia, el jamón te lo envío por mensajería urgente.
Un grandísimo abrazo,
PG
A través de esa elegancia ligera, desprovista para su bien de todo acartonamiento, que caracteriza a la voz que narra, Pablo Gonz hace suyo un tema delicado: nos recuerda, a través del humor, que somos muchos, demasiados, para el espacio disponible. En esta “Novela Lebensraúmica” —acertado título—, al mejor modo cervantino, el escritor primero provoca una sonrisa para luego descubrir el abismo. Descubre, destapa lo que con tanto cuidado habíamos escondido porque desde el comienzo de los tiempos elegimos ignorar. Somos muchos, demasiados, para no estorbarnos unos a otros, no mentirnos, no perjudicarnos.
Descubierto, ya, lo escondido, el desarrollo de la trama no se propone calmar angustias u ofrecer soluciones varias, no, su objetivo es más sutil. La meta es confrontar al lector, empujarlo hacia un espejo que indique con claridad —que descubra, en la Lebensraúmica siempre estaremos retornando, de un modo u otro, a esta palabra—, su nivel de tolerancia para con los de su propia especie, su temple para vivir en un mundo que, aparentemente, le queda chico a él y a los suyos.
Me aventuro a ofrecer, con toda humildad, una respuesta a la interpelación con la que el mundo de la novela nos enfrenta. Quizá el sendero a recorrer resulte más amable si lo caminamos con la misma divertida, poética gracia con la que Pablo Gonz nos narra esta historia.